sábado, 13 de febrero de 2010

La Entrega



Uno puede aprender algo de las sensaciones. Que vienen, que van, que se presentan…

Algo para ser optimista. Por no decir nada, y declararse vencido.

Hace tiempo tenemos varios, no digo muchos. Aunque no sé por qué no digo muchos. El tema es que tenemos la pretensión de explicar algunas cosas que por naturaleza pareciera que exceden.

Muy bien.

Pareciera que no nos importa. Vemos la inquietud que se manifiesta, nos acercamos inquietos. Observamos de adelante. Observamos desde atrás. Y también desde los dos costados, en diagonal, de arriba y de abajo.

Lo que vimos, lo entregamos.

Después el otro se queda con una respuesta tal vez impropia de las tantas posibles. Con atisbos de certeza y también con algunas dudas.

Pero nosotros nos vamos tranquilos. Porque lo que vimos, eso que efectivamente vimos…

Lo tomamos. Y luego lo entregamos.
.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Podés dejar tu comentario como usuario de Blogger, con tu nombre o en forma anónima. Seleccioná abajo.