miércoles, 1 de julio de 2020

El hombre que no sabe




No me enoja el hombre que no sabe.


El que me hace calentar es el hombre que no sabe y afirma como si supiera. Hace aseveraciones determinantes y no sabe un carajo. Pero habla con la certeza del hombre que en verdad sabe, cuando desconoce hasta lo más esencial.


Ejercito la paciencia pero tener que escuchar al hombre que no sabe hablando como si fuera un hombre que sabe es un verdadero suplicio.


El problema no es que hable como si supiera, es que afirma y asevera cosas que no se corresponden con la realidad. Entonces hay que escucharlo afirmar estupideces.


No se trata de estar de acuerdo o no, ese no es ningún problema. Por el contrario nada es más enriquecedor que escuchar a quien piensa diferente. El tema complicado es escuchar a quien hace afirmaciones que no se corresponde con la realidad.


Es como que diga, miren esta hoja es negra.


No, no es negra.


Todos la vemos, es blanca. Bien blanca.


Es un dato objetivo de la realidad. Lo  puede corroborar cualquiera.


Negra no, blanca.


En fin, yo estoy grande para andar perdiendo el tiempo vinculándome con el hombre que no sabe y se encapricha en dar certezas que no se corresponden con la verdad. Encima se ofusca si cualquiera le indica que la aseveración es errónea, objetivamente equivocada.


El tema es que uno se pone grande y ya no tiene tiempo para perder en cuestiones básicas. 


Ustedes verán lo que hacen pero yo, Juan Manuel, no pierdo un minuto más de mi vida con el hombre que no sabe y se encierra en sus mentiras. 


Que se embauque él mismo, yo me voy a jugar.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Podés dejar tu comentario como usuario de Blogger, con tu nombre o en forma anónima. Seleccioná abajo.