sábado, 9 de marzo de 2019

¿Incogibles?


Un diputado puso en twitter que las feministas son incogibles. Aunque en realidad no dijo eso, sólo dijo: “yes”.

Dijo “yes” a una pregunta que le hizo una usuaria de la red social con la intención quizás de que diga “yes”. 

Entonces, dijo. Dijo “yes”.

Luego, como es de esperar en nuestro país que se caracteriza en parte por evitar decir lo que al otro no le gusta dado el enojo y la enemistad que tal proceder genera, hizo tal vez que el diputado se retraiga y de lugar a la cobardía que se encargó de corregir el supuesto error. Dejando bien clarito que en realidad no dijo lo que dijo o bien no quería decir lo que dijo. 

O bien quizás dijo que no opina lo que dijo. Que opina otra cosa.

De modo que todo el mundo quede contento y nadie vaya a pensar que un diputado de la nación piensa que las feministas son todas incogibles. Lo cual lo único que podría producir es cierto enojo e indignación de algunas feministas que se sienten denigradas o bien perderían a todas luces la posibilidad de tener una aventura sexual con un representante de la ciudadanía.

Así que el diputado reculó y por eso uno escribe.

¿Está bien que alguien no pueda decir lo que quizás piensa? ¿Se debe opinar siempre igual al otro para que quede contento? ¿No puede uno manifestar su opinión aunque al otro le desagrade? ¿Los políticos deben tragarse lo que piensan siempre para honrar la hipocresía?

¿Es una calamidad que un diputado pueda llegar a pensar que las feministas son incogibles?

Las imágenes de algunas feministas que no representan a muchísimas mujeres, gritando como locas o desnudas despiertan las más disimiles interpretaciones y opiniones.

Las que dañan los bienes públicos con grafitis como hicieron alguna vez en la catedral, mean en el altar o corren a gritos y a patadas a otras mujeres que opinan distinto, tampoco representan a todas.

Quienes ejercen esas conducta piensan que quizás están haciendo una revolución memorable, que están llamadas a honrar una misión que las convoca. Por eso putean, se desnudan, gritan enardecidas, se tiran pedos con ruido y olor.

Todo vale para expresar un feminismo que resulta desconcertante para otros.

Los que piensan que son boludas, están locas, o les falla la cabeza.

Yo por supuesto no voy a andar pensando eso. 

No vaya a ser que diga que son incogibles y luego me tenga que retractar.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Podés dejar tu comentario como usuario de Blogger, con tu nombre o en forma anónima. Seleccioná abajo.